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Palabras del Embajador Zou Xiaoli en la 133° Edición de la Exposición Rural
2019-08-04 04:33

Estimado Sr. Luis Etchevehere,Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca

Estimado Sr. Daniel Pelegrina, Presidente de la Sociedad Rural Presidente

Estimados amigos empresarios de China y la Argentina

¡Un cordial saludo a todos! Me es muy grato asistir a la 133° Exposición Rural de Argentina a invitación del Sr. Ministro Etchevehere para festejar junto con ustedes el fructífero desarrollo agroindustrial de la Argentina y diseñar los planes maestros para impulsar la cooperación agropecuaria China-Argentina de gran calidad.

La Sociedad Rural Argentina constituye el artífice, promotor e innovador de la modernidad agrícola y la Expo Rural representa la plataforma más importante para mostrar los abundantes recursos y los últimos éxitos del sector y la investigación científica, siendo un vehículo eficaz que ayuda la sostenida inserción de la agroindustria argentina a la cadena global del valor. La gloria histórica de la agricultura argentina se renueva con enorme atracción en esta plataforma centenaria. De hecho, la agricultura consiste en uno de los sectores más estratégicos y fructíferos de la cooperación China-Argentina. Quería aprovechar el acto de hoy para compartir con ustedes algunas observaciones sobre nuestra colaboración agropecuaria.

La Argentina goza del prestigio de ser “el granero, la carnicería y la bodega” del mundo. A partir del inicio de mi misión diplomática, a través de los contactos e intercambios con los políticos, empresarios y académicos así como las visitas en terreno, he logrado percibir que en el sector agrícola la Argentina se encuentra dotada de ricos recursos, numerosos talentos y un poderoso sistema de investigación científica y servicio, así como las potencialidades de desarrollo sostenible. En calidad del Embajador, no sólo espero que los consumidores chinos igual que yo, tengan la suerte de probar la carne, el vino y las frutas de la Argentina, sino que ambos países fortalezcan su cooperación agropecuaria integral en aras de compartir un desenvolvimiento conjunto. En los últimos años, gracias a la atención y promoción de las autoridades y los esfuerzos conjuntos de nuestras entidades agrícolas, las embajadas y las cámaras, se está haciendo realidad este lindo sueño paso a paso.

Se ha registrado un aumento estable de la exportación de los productos agropecuarios argentinos con creciente valor agregado y diversificación, lo que ubica a nuestro país en el primer lugar del ranking de los destinos de la venta de productos agrícolas de Argentina al recibir la mitad de la carne bovina y los mariscos, así como más del 85% de la soja que exporta. En los primeros cinco meses de este año, la exportación de soja, aceite de soja, carne bovina y mariscos a China totalizó cerca de 1500 millones de dólares USD, en particular, con una multiplicación por 23 veces de la venta de soja. Otros productos estrella como uva, arándano, carne ovina y miel también se han colocado en el mercado chino sucesivamente, y subió el primer embarque de la carne de cerdo argentinos rumbo a China el mes pasado.

El crecimiento del comercio agropecuario bilateral también ha servido para fomentar la cooperación en materia de la inversión. Más de una decena de empresas agrícolas chinas encabezada por COFCO han invertido más de mil millones de dólares en la Argentina y tres compañías pesqueras chinas tienen establecidas cinco procesadoras en la Argentina. Según las estadísticas, las inversiones chinas en la agroindustria argentina han contribuido a la creación de más de 4200 puestos de trabajo, generando un ingreso de 2800 millones de dólares y pagando un monto impositivo de más de 14,500 millones de pesos. Últimamente, se están explorando las posibilidades de nuevos proyectos de inversiones, entre ellos, La Empresa Pesca Marina de Rongcheng, Provincia de Shandong y la Empresa Pesquera de la Patagonia y Antártida S.A ya rubricaron una carta de intención de inversiones.

Nuestra colaboración científica e intercambio tecnológico en materia de la agroindustria China-Argentina ha dado buen arranque. En febrero pasado, se dio el visto bueno al cultivo comercial de la soja transgénica resistente a la herbicida, desarrollada por el Grupo Dabeinong en la Argentina. En abril pasado, ambos países firmaron los instrumentos de inocuidad. En junio pasado, los investigadores de la Academia China de Ciencias Agrícolas visitaron al INTA para explorar un estudio conjunto sobre la peste y la plaga de cultivos. Este mes, la parte china invitará a 20 funcionarios y técnicos argentinos a China para compartir sus experiencias en la utilización de metano. También cabe destacar que la vacuna para uso animal con tecnología ganadera argentina es muy popular en China.

Nuestra colaboración agropecuaria ha avanzado del ámbito bilateral al plano multilateral. Ambos gobiernos mantuvieron una estrecha comunicación y coordinación en defensa de los intereses comunes de los países en desarrollo, lo que constituye un ejemplo de la cooperación Sur-Sur. Gracias al contundente respaldo de la parte argentina, el Dr. Qu Dongyu, Viceministro de Agricultura y Asuntos Rurales de China, fue electo Director General de la FAO por amplio margen, por lo que quisiera expresarle mi sincero agradecimiento al sector agroindustrial. Estamos convencidos de que ambas partes aprovecharán esta oportunidad para ensanchar la cooperación agrícola multilateral, en especial, en áreas de la aplicación de la biotecnología y el fortalecimiento de la construcción de capacidades del Centro de Referencia Tecnológica de la FAO como un centro de referencia, a fin de contribuir en mayor medida al desarrollo agrícola y rural, el progreso tecnológico y la lucha contra la pobreza de los países de todas las latitudes, sobre todo, los en desarrollo.

A mi juicio, en la próxima etapa, China y Argentina deben avanzar en una cooperación agropecuaria omnidireccional y multiárea, con cobertura de toda la cadena industrial y aprueba de todo el tiempo. La cooperación multiárea se refiere a la colaboración en diversos sectores, tales como los granos, la ganadería, la acuicultura y la silvicultura, entre otros. Toda la cadena industrial atañe a los eslabones como mejoría de semilla, uso de tierra, producción, procesamiento industrial, comercio, logística y prevención de plaga. Por la cooperación omnidireccional, se entiende que hay que dar impulso a nuestra colaboración tanto en el plano bilateral como en el regional y global. Con respecto a la cooperación a prueba de todo el tiempo, diría que sean situaciones favorables o no en que estamos, debemos aprovechar las oportunidades y sobreponernos a las dificultades en procura conjunta del desarrollo. Me preguntaron si es posible alcanzar este objetivo ante una economía global de creciente inestabilidad e incertidumbre. Quería compartir con ustedes varias razones que me infunden la confianza.

En primer lugar, China es el "mercado mundial" irremplazable y único. Dispone de una clase media del mayor tamaño y crecimiento en el mundo, que presenta una enorme potencialidad de consumo. En la actualidad, China se ha convertido en la mayor importadora mundial de productos agrícolas. En 2018, las importaciones agrícolas de China totalizaron 125.860 millones de dólares, lo que representó una décima del comercio agrícola mundial. Según las estadísticas, la demanda anual de importación de soja de China ronda 90 millones de toneladas, la de carne vacuna supera un millón de toneladas y la de todo tipo de productos lácteos sobrepasa los 2,5 millones de toneladas. El Presidente chino Xi Jinping subrayó en repetidas ocasiones: "La puerta de apertura de China no se cerrará, sino que se abrirá aún mayor". En el segundo Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, el Presidente Xi anunció la decisión de China de aumentar en mayor medida las importaciones de bienes y servicios. La parte china ha incluido en el documento gubernamental de las políticas agrícolas expresiones como “expandir proactivamente las importaciones de los productos agrícolas de más necesidad y diversificar los canales de la importación”. China, cuyo mercado posee una gran capacidad, un crecimiento rápido y una demanda creciente, desea ver en la Argentina un proveedor de productos agrícolas estable, confiable, de alta calidad y a largo plazo.

En segundo lugar, tanto China como Argentina tratan la cooperación agrícola desde una altura estratégica y perspectivas largoplacistas. Durante su visita a Argentina en marzo pasado, el Viceprimer Ministro chino Hu Chunhua dio una gran importancia a la investigación del sector agrícola y el intercambio de opiniones con las altas autoridades del gobierno, de manera que promovió la implementación de los acuerdos alcanzados por nuestros mandatarios durante la visita del Presidente Xi a Argentina el año pasado. En pasado abril, el Viceprimer Ministro Hu sostuvo en Beijing otra fructífera conversación con el Ministro Etchevehere sobre la profundización de la cooperación agrícola. Bajo el impulso de ambos gobiernos, China y Argentina han establecido un grupo de trabajo para estudiar la cooperación en el desarrollo y la utilización de la tierra, hecho que refleja plenamente el consenso y la confianza de ambas partes en una mayor cooperación agrícola bilateral.

En Tercer lugar, la economía de China y Argentina, especialmente en el sector agrícola, es altamente complementaria y contempla amplias perspectivas hacia el futuro. La población china de casi 1.400 millones es 31 veces mayor que la argentina, en tanto que la superficie de la de 130 millones de hectáreas es solo tres veces la argentina. China y Argentina son potencias agrícolas por igual, pero China es más bien un gran consumidor de productos agrícolas y Argentina a su vez un importante exportador. Asimismo, la parte china tiene inmensas demandas y abundantes recursos financieros, mientras la parte argentina está dotada de condiciones naturales y recursos, así como avanzadas tecnologías agrícolas privilegiadas. En este sentido, nuestra cooperación agrícola se basa en una alianza entre fuertes, lo que permite lograr beneficios mutuos y ganar-ganar en un nivel superior.

Al mismo tiempo de vislumbrar las brillantes perspectivas de nuestra cooperación agrícola y aprovechar las oportunidades de desarrollo, debemos encarar algunos problemas y desafíos. Hoy por hoy, nuestra cooperación agrícola, ya sea de comercio o inversión, se limita a una serie de productos. Aunque la cantidad va aumentando, está lejos de tener uso pleno de sus respectivas ventajas, lograr efectos de escala y conseguir un salto cualitativo. Algunos empresarios y agricultores argentinos no han podido seguir el ritmo de los cambios en la demanda del mercado chino. Todavía creen que para importar de productos agrícolas de China solo presta atención al precio en vez de calidad, pasando por alto la rápida reestructuración del consumo de China y la diversificación de las demandas del mercado. De hecho, el concepto de consumo de los chinos ya ha pasado de "tener comida" a "tener buena comida". A pesar del vehemente deseo de cooperación entre los círculos industriales y comerciales de los dos países, aún no existe mecanismos y plataformas para conectar con precisión las empresas. Estos desafíos en sí engendran nuevas oportunidades para mejorar la cooperación y la eficiencia. Si las dos partes podemos trabajar unidas, superando conjuntamente el cuello de botella, la cooperación agrícola entre China y Argentina se verá en una nueva ronda de fuerte crecimiento.

He aquí, quería proponer algunas ideas específicas de cooperación.

Primero, guiado por los consensos alcanzados por los dos Jefes de Estado, debemos reforzar el diseño al alto nivel y planificar la cooperación agrícola China-Argentina a mediano y largo plazo para proporcionar un apoyo político sólido y estable a la cooperación agrícola bilateral. Las dos partes debemos ampliar mutuamente la apertura del mercado de productos agrícolas, facilitar la inversión recíproca, establecer plataformas de cooperación en investigación científica y capacitación de los técnicos, así como ofrecer los mejores recursos para la cooperación, con el objetivo de crear una "Comunidad de Desarrollo Agrícola China-Argentina" y hacer prosperar la idea de la interconexión y desarrollo compatibles.

Segundo, se trata de materializar la cooperación que permite cubrir toda la cadena agroindustrial, enfocada en comercio, inversión e investigación científica, para generar una enorme sinergia. Nuestros dos países deben reestructurar la cooperación agropecuaria, aumentar el apoyo financiero y la inversión en el área de investigación a fin de explorar la colaboración en la mejoría de semillas, prevención y tratamiento de plagas y enfermedades, así como el procesamiento profundo de los productos agrícolas, con el propósito de dar más valor agregado al intercambio comercial de productos agropecuarios. Un ejemplo, podemos pensar en la cría conjunta de cerdos en Argentina, que daría múltiples beneficios, a saber, utilización de la harina de soja que se produce acá, fomento de la exportación de carne porcina al mercado chino y generación de puestos de trabajo. Mientras tanto, podemos ensanchar la colaboración en áreas de leasing en el desarrollo de los terrenos, inversión en la infraestructura del almacenaje y la logística a fin de reducir el costo y elevar la competitividad. Ambas partes pueden abordar la colaboración en torno a la construcción de la base de abastecimiento pesquero integral, la industria astillera y el mantenimiento de buques para construir juntos las bases modelo de cooperación en agricultura, ganadería y pesca.

Tercero, es imprescindible coordinar los recursos disponibles, renovar plataformas y mecanismos y mejorar rondas de negocios entre las empresas. Con el objetivo de promover los productos agropecuarios argentinos de calidad en el mercado chino y elevar la eficiencia del matchmaking entre las empresas de ambos países, en lo que va del año, ambas partes han organizado “Sesión de Diálogo de la Industria de Harina de Soja de Argentina y China” en Beijing y “Seminario sobre el Intercambio Agropecuario China-Argentina” en Buenos Aires. Nuestra Embajada acompañará a las empresas chinas radicadas acá para llevar adelante actividades de promoción de inversiones y comercio exterior en las diversas provincias de Argentina. Estamos dispuestos a celebrar un foro de empresas chinas y argentinas, a la expectativa de contar con la presencia de la Sociedad Rural Argentina, partiendo de los éxitos logrados en la primera edición de la Exposición Internacional de Importaciones de China, la parte argentina pueda aprovechar la oportunidad de la segunda edición para promover la marca “Hecho en Argentina”, haciendo nuevas amistades y firmando más contratos.

Cuarto, hay que explorar la construcción conjunta de “la Franja y la Ruta” agrícola entre China y Argentina, con el fin de crear un nuevo espacio para la cooperación entre China y el MERCOSUR, así como China y América Latina en general. El sentido y potencial de nuestra cooperación agrícola ya no se limita al ámbito bilateral, sino que se extiende a la dimensión regional y global con un peso preponderante. Podríamos trabajar junto con otros países de la región en la apuesta por integrar la cooperación agrícola en el marco de “la Franja y la Ruta” con la estrategia del desarrollo subregional y regional de América del Sur, mediante proyectos de cooperación en el desarrollo de tierra, obras hidráulicas, logística, transporte, almacenaje, procesamiento industrial, comercio e inversión, lo que permite la materialización de los beneficios mutuos y ganancias compartidas para los países involucrados, haciéndoles mejores beneficiarios de la globalización.

Al final, me gustaría compartirles mi experiencia de la Expo Rural. El recorrido me sirvió para tener un mejor conocimiento sobre la alta calidad de los productos agroindustriales argentinos y el alto nivel de los servicios agrícolas y el sistema de investigación científica. Me impresionaron también el moderno concepto y el formato original de la organización. Todo ello me da mayor confianza para impulsar la cooperación agropecuaria bilateral junto con mi equipo de la Embajada, para que alcancen un desarrollo integral, sustentable y de calidad. Este año, el Ministerio de Agricultura de Asuntos Rurales de China envió por primera vez una misión oficial para visitar esta Expo. La parte china mantendrá una estrecha coordinación con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, la Sociedad Rural y otros organismos concernientes, en el afán de fortalecer el intercambio de información y experiencia entre las cámaras y asociaciones sectoriales de ambos países y apoyarles en la creación de nuevas plataformas más eficientes de cooperación agropecuaria. Albergo la esperanza de poder ver la presencia de empresas chinas en la Expo Rural para el año que viene y estoy seguro de que con los esfuerzos conjuntos de ambas partes, nuestra cooperación cosechará aún mayores éxitos.

Para finalizar, expreso mis mejores votos por el éxito de esta edición de la Expo Rural. ¡Muchas gracias!

Para sus Amigos :   
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